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Dos agricultores de corazón, un guía de Doñana y un cabrero coplero
“Campechanos” se traslada hasta el municipio gaditano de Sanlúcar de Barrameda para conocer a Francisca Moreno, valenciana de nacimiento y sanluqueña de corazón. La pasión por el campo le viene por su abuelo y, aunque comenzó a estudiar Medicina, la dejó en el tercer año para dedicarse al campo. En la provincia de Huelva nos encontramos con Ambrosio Lago, natural de Aznalcázar. Su abuelo, cabrero, le inculcó la pasión por el campo y esto hizo que su mayor afición fuera investigar el ambiente rural que le rodeaba. Los documentales de la época le ayudaron a seguir aumentando esta pasión. En busca de su sueño, oposita para entrar en Doñana y lo consigue. Al principio, se dedica a la oficina, pero pronto le ofrecen ser guía del Parque. “Campechanos” se desplaza también hasta Santiponce, en la provincia de Sevilla, para visitar a José de la Bandera, un cabrero muy especial. Siente verdadera admiración por estos animales y no cambiaría la vida que ha tenido ni renunciaría a la compañía de sus cabras, inspiración de José para componer y cantar coplas, en medio del campo, su otra pasión. Pampaneira, en Granada, es el último destino de "Campechanos". Allí reside Antonio Pérez, que tiene tras de sí tres generaciones dedicadas al campo como agricultores. Él, a pesar de estudiar, cada verano volvía al campo a seguir las tradiciones de sus antepasados. Su padre, al conocer la pasión que siente Antonio por el campo, decidió ejercer de maestro y enseñarle todo lo que él había aprendido a su vez de su padre, creando así una nueva generación de agricultores. Debido a las innovaciones que se han producido en los últimos años respecto al campo, hace cinco años Antonio decidió pasar su cosecha a la agricultura ecológica, convirtiéndose a su vez en miembro de la Asociación de Agricultores Ecológicos de la Alpujarra.