Tras su ausencia en el particular concurso "veraniego" de 2022, la chirigota de Puerto Real llega al Falla con la frescura y el humor que la caracteriza, conquistando al público desde su presentación, totalmente cambiada a la de Preliminares y muchas otras novedades en el resto de fases. Nace el tipo en reacción a la mala suerte de conseguir su mayor éxito en la edición de 2020 con "Los impacientes" y tener que celebrarlo con un confinamiento. El leitmotiv da para todo. Lo mismo sirve para revalorizar la publicidad del patrocinador en el decorado, que para sacar los colores a algún periodista. El pasodoble que da una inspiradora visibilidad a los problemas de salud mental, es la única copla que repiten en el concurso. El otro pasodoble piropea a la Tacita. Los cuplés sirven para describir la asombrosa fatalidad del desgraciaíto; y para sacarle punta a la tendencia juvenil de salpicar la conversación con abundantes expresiones en inglés.